Vamos todos con flores a porfía!

Faltan pocas horas para la Fiesta. Nuestra Madre nos espera, como todos los años, como todos los dias.

He recolectado aquí cantos para festejar a nuestra Auxiliadora, de los que acostumbramos entonar en la tradicional Verbena nocturna, o bien durante la Misa o la Procesión.

Algunos ya los he colocado antes, pero los vuelvo a poner para facilitar el trabajo de copiar las letras.

Feliz fiesta!

Venid y vamos todos

Este tema es un verdadero clásico en los colegios y casas salesianas de Latinoamérica. Compuesto por Monseñor Santiago Costamagna, hace más de un siglo, lo usamos para acompañar los desfiles con flores frente al altar mariano, cada 24. Frecuentemente es el canto de entrada en la Misa del 24 de mayo.

Venid y vamos todos

Venid y vamos todos con flores a porfía,
con flores a María, que Madre nuestra es (bis).

De nuevo aquí nos tienes, purísima doncella,
más que la luna, bella, postrados a tus pies.

Venimos a ofrecerte las flores de este suelo,
con cuánto amor y anhelo, Señora, tú lo ves.

Por ellas te rogamos, si cándidas te placen,
las que en la gloria nacen, en cambio, tú nos des.

Monseñor Santiago Costamagna, SDB


Hoy he vuelto

Este canto del P. Gabaraín, suele usarse como canto de salida o comunión en las misas de Novena.

Para escuchar la canción, click en el título:

Hoy he vuelto

1. Cuántas veces siendo niño te recé,
con mis besos te decía que te amaba.
Poco a poco con el tiempo, olvidándome de Ti,
por caminos que se alejan me perdí.

Hoy he vuelto, Madre, a recordar
cuántas cosas dije ante tu altar
y al rezarte puedo comprender
que una Madre no se cansa de esperar.

2. Al regreso, me encendías una luz,
sonriendo desde lejos me esperabas.
En la mesa, la comida aún caliente y el mantel
y tu abrazo en mi alegría de volver.

3. Aunque el hijo se alejara del hogar,
una madre siempre espera su regreso.
Que el regalo más hermoso que a los hijos da el Señor
es su madre y el milagro de su amor.

P. Cesareo Gabaraín "Eres tú, María" p. 12


Madre

Junto a ti, María

1. Junto a ti, María, como un niño quiero estar,
tómame en tus brazos, guíame en mi caminar.
Quiero que me eduques, que me enseñes a rezar,
házme transparente, lléname de paz.

Madre, madre. (4 v.)

2. Gracias, Madre mía, por abrir tu corazón,
haznos más humildes, tan sencillos como tú.
Gracias, Madre mía, por llevarnos a Jesús,
porque nos congregas y nos das tu amor.

Kairoi


María de mi niñez

Esta preciosa canción la compuso el padre Jose Fernandes de Oliveira, SCJ más conocido por nosotros como Padre Zezinho. Como les he contado (María de mi niñez), es mi tema mariano favorito. Se usa cantarlo en la Comunión o la Salida.

Para escucharlo, clickear este link:

María de mi niñez

1. Cuando era pequeño, muy pequeño,
recuerdo que siempre junto a mi cama,
juntaba las manos y de prisa rezaba,
mas rezaba como quien amaba.
Las avemarías yo rezaba
y siempre comía unas palabras,
y a veces, cansado, me quedaba dormido,
mas dormía como quien amaba.

Ave María de mi Señor,
el tiempo pasa, no vuelve atrás,
siento nostalgia de aquellos días
cuando dormía pensando en ti.
Ave María, Madre de Dios (bis).

2. Después, fui creciendo (2v.)
y eché en el olvido mis oraciones;
llegaba a mi casa disgustado y cansado,
y de hablarte nunca me acordaba.
Anduve dudando, hoy recuerdo,
de cosas divinas que me enseñaban.
En mí estaba muerto aquél niño inocente,
mis caminos de ti se alejaban.

3. Tu amor es muy grande, no se acaba,
la Madre no olvida al que se marcha.
Hoy llego a mi casa disgustado y cansado
pero rezo como ayer rezaba.
Las mismas palabras que ahora rezo,
a veces olvido y hasta me duermo!
No importa dormirse sin rezar lo debido,
pues está mi corazón contigo.

P. Zezinho, "Estoy pensando en Dios".


Auxiliadora y Madre

Auxiliadora y Madre, Virgen María,
mientras busco la senda eres mi guía.

1. En tu templo yo mi historia comencé,
que eres Madre yo lo supe desde niña;
me enseñaste, Auxiliadora,
que la fe y la esperanza
y el amor nos dan la vida.

2. En mis ojos tu mirada se prendió
y aprendí a descubrir en cada niño,
en el rostro de aquel pobre,
en la mano del mendigo,
tu dolor y el de tu Hijo.

3. En tus manos yo mi vida entregué,
tu presencia es lo que siempre yo anhelo;
por la vida voy sembrando,
por la vida voy cantando
porque eres mi consuelo.

Salve, salve

Este "popular" canto une a padres, hijos, nietos y abuelitos. Ya el año pasado les hablé de su antigüedad (Salve, salve). No se conoce el autor.

Se utiliza mucho en las procesiones marianas. En la Verbena y la Procesión MA, se suele cantar tipo marcha, frecuentemente de modo muy rápido, marcando un ritmo alegre y festivo con las palmas.

Para escuchar, hacer click al link:

Salve, salve

Salve, salve, cantaban, María.
Que más pura que tú sólo Dios.
Y en el cielo una voz repetía:
Más que tú, sólo Dios, sólo Dios.

Con torrentes de luz que te inundan,
los arcángeles besan tu pie,
las estrellas tu frente circundan,
y hasta Dios complacido te ve.

Pues, llamándote pura y sin mancha,
de rodillas los mundos, están,
y tu espíritu arroba y ensancha
tanta fe, tanto amor, tanto afán.

¡Ay! bendito el Señor que en la tierra
pura y limpia te quiso formar,
como forma el diamante la sierra,
como cuaja las perlas el mar.

Y al mirarte entre el ser y la nada,
modelando tu cuerpo exclamó:
«Desde el vientre será inmaculada,
si del suyo nacer debo yo».

Flores, flores las nubes derramen
de la Virgen sin mancha en honor,
y su Reina los cielos la llamen,
y los hombres su Madre y su amor.

Ella pide virtudes por palmas,
corazones por templo y altar;
para luz de tus ojos, las almas
que pretenden su amor cautivar.

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